jueves, 13 de agosto de 2009
Nació con la traición y murió con el poder
se convierte en bueno cuando es malo…
Nos quemamos despacio sin medidas…
Para obtener eso, que deseamos.
Nos juega una mala pasada…
pero al final nos da lo indebido…
Nos brota como alergia, traspasando tendones,
venas, músculos y piel.
¿Qué nos provoca el deseo?
¿Qué hacemos para obtenerlo?
Es un fuego que nadie lo lograra apagar.
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1 comentarios:
Definitivamente es fuego...pero a algunos nos encanta jugar con fuego pese al riesgo de quemarnos..
Un abrazo!
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Gotas de LLuvia